domingo, 18 de septiembre de 2011

martes, 6 de septiembre de 2011

De chanchos, conejos y perejiles

Después de leer muchos diarios, ver contradicciones y volver a admirar la inoperancia de las fuerzas que deberían protegernos, aunque a esta altura solo esperamos que no nos metan un corchazo en la frente, recordé un viejo pero eficaz chiste que pinta de pies a cabeza esta ¿caceria? o cosecha de perejiles con el caso Candela: 


En un concurso de policías, se encontraban los tres mejores del mundo, Scotland Yard de Inglaterra, SWAT de EEUU y la Bonaerense. La prueba para decidir cual era el mejor del mundo, era capturar un conejo en el menor tiempo posible, en un bosque intrincado. 


A los 10 min. se aparecen los ingleses: "Utilizamos la técnica deductiva con nuestra amplia experiencia, somos los mejores"


A los 12 min. se aparecen los Americanos: "la Tecnología, nos hace los más eficientes!" 


Pasan 12 horas... y pasan 24 Horas y nada, hasta que aparece la Bonaerense…-Acá estamos!  Tarde pero presentes!
Sacan de una mochila un chanchito…
-Habla sorete! Confesa!

Y el pobre chanchito todo golpeado, fracturado y machucado de rodillas gritaba:
-LO JURO, LO JURO, SOY UN CONEJO!!!


lunes, 5 de septiembre de 2011

Nacionalizando Villa Epecuén

Para los que no conocen la historia, esta villa se fundó a orillas de la Laguna Epecuén en la década del 20. Entre 1950 y 1970 vivió su época de oro, recibiendo a más de 25000 turistas por temporada.

En noviembre de 1985 la laguna (que estaba creciendo y era contenida) rompió el terraplén e inundó la Villa, que desapareció por completo.

Existen producciones documentales y fotográficas de la villa que son desgarradoras. Entre todas ellas, encontré una foto en particular que me llamó la atención:

Desolación.

No hay mucho más. Cristina y su banda están confiados en el terraplén del agro, mientras buscan alguna otra caja para llevarse al buche (obras sociales? se arriesgarán a ponerse de tujes a los sindicatos?) y poder seguir bancando a una población adicta (AUH, plasma, planes sociales, servicios subvencionados, etc)

El terraplén no tiembla. Desde la Rosada miran de reojo la sequía en EEUU. Eso los tranquiliza y les da más soga para maltratar opositores y medios no-adictos.

El terraplén depende de una coyuntura que recorre un camino distinto al de la economía de mercado mundial. Los K repiten hasta el hartazgo que esto ocurre por las geniales medidas de Pomelo Rocker. Pero en el fondo, solo les importa la soja arriba de 500 usd en Chicago.

La lógica K habla de menemoides, pero lo tiene a CSM en la lista de La Rioja; putea a la derecha, pero el candidato a vice es ex-UCEDE; habla de mafia pero no de inseguridad...

No acepto la negación como método. No la entiendo. Si el terraplén cede, será por las burradas que hicieron, pero sobre todo, será por lo que dejaron de hacer.



domingo, 4 de septiembre de 2011

¿Quién es el boludo?


Años atrás un amigo me recomendó un libro de un autor desconocido para mi en ese entonces -yo lector recreativo, ocasional-, John Kennedy Toole. El título en castellano me pareció en ese momento gracioso y aplicable a las realidades que a diario, y cíclicamente, nos depara nuestra querida Argentina: “La conjura de los necios”. 

Ignatius sería un valuarte del Modelo Nac&Pop.

La novela fue publicada luego del suicidio de Toole, ganó el premio Pullitzer y fue record de ventas. 
Cuestión que muchas veces me encuentro atrapado entre el protagonista Ignatius Reilly, un idiota con todas las letras, y la realidad -que serían los necios-.

Ignatius es un pobre imbécil, convencido de su propia mentira. En esta dimensión alterna él se autoproclamaba como un incomprendido de otro tiempo. Vivía una realidad paralela y juntaba sus cuitas en cuadernos, que algún día serían su obra maestra. 

Lo leo a Ignatius y creo que los ideólogos del relato oficial se inspiraron en este personaje. Un negador profesional de la realidad, que ante la posibilidad de un fracaso o la no concreción de sus objetivos, encontraba un montón de fantasmas -la fortuna, el destino- que atentaban contra su destino glorioso. 

Después de entender que la reproducción de la grabación de la llamada de los secuestradores a la tía de Candela en canales de TV al mismo tiempo que encontraban el cuerpo tenían que ver con las declaraciones de ese mismo día a la mañana de Anibal Fernandez -moviendo el bigote y sobrando a los periodistas-: “ustedes solo ven la punta del iceberg”; me volvió a caer la ficha. 

"Esto no es un bigote, son pelos en sentido vertical, uno al lado del otro" Capacidad ilimitada para negar evidencias irrefutables.

Ignatius es tan K, como lo es negar que la muerte de Candela tiene que ver con la inseguridad.
Ignatius es tan K, como lo es negar que las mafias no son otra cosa que la inseguridad llevada al próximo nivel: delincuencia organizada y coordinada con el poder de turno.

Lamentablemente, no se si el necio conjurado soy yo, o la mitad que le dio un cheque en blanco a Cris y su banda para que destrocen el país. 

A veces, cuando leo a una vocera como Florencia Peña (el décimo de punto de rating -0,1- más caro del mundo), me siento un necio conjurado. O un estúpido, a secas.

80 lucas por capítulo. ¿Se incluirá su producción política-intelectual en este presupuesto?